domingo, 21 de abril de 2024

Plural

 



Me saludó. No pudo hacerse el loco
y acomodó su beso en mi mejilla.
Quiso también exagerar un poco
al afirmar "estoy de maravilla".
Me dijo ser feliz en el trabajo,
pues, al cambiar, se eleva un nuevo mundo.
Tenía un mal aspecto del carajo
como el infiel que habita el inframundo.
Alardeó de logros importantes,
de contactos, de gloria, igual que antes.
Seguía en su disfraz y tan a gusto.
Me preguntó, por fin, qué tal me iba.
Le respondí, simpática y esquiva:
"Yo tengo paz". Y se murió del susto.

Rosales





Esto es

 



Un impulso frenético que choca.
Una urgente legión de agitadores.
El sabor adictivo de tu boca.
El febril festival de los olores.
La gloria pura de sentir tu peso.
La saliva temblando en el ombligo.
El golpe de humedad en cada beso.
El ímpetu feroz de estar contigo.
Abrirme entera, toda, desarmada.
Acoger en la carne sin salida
el delicioso ritmo de tu espada.
Frenar el corazón en la embestida.
Renacer el latido de la nada
mientras pierde la muerte ante la vida.
Rosales





Paz

 




Qué ganas de volverme purpurina,
qué ganas de dormir hasta la una,
qué ganas de dejar la adrenalina,
qué ganas de que llueva una fortuna.
Qué ganas de eludir una batalla,
qué ganas de tomarme nada en serio,
qué ganas de correr hasta la playa,
qué ganas de viajar a otro hemisferio.
Qué ganas de romper el decorado,
qué ganas de volar por el tejado,
qué ganas de perder el antifaz.
Qué ganas de escaparme de mis huellas,
qué ganas de subir a las estrellas,
qué ganas de poder vivir en paz.


Rosales





miércoles, 3 de abril de 2024

Post Mortem

 



Se lo tragó la tierra, como al rayo,
y no dejó un prueba de que existe.
Jamás volví a saber donde me hallo
ni que infernal presencia le reviste.
Se lo tragó la tierra y me amurallo
de quien vino a por nada y nada insiste.
Enterré la verdad en lo que callo
bajo este verso decadente y triste.
Cuando maté el espacio con su nombre,
perdí toda esperanza sobre el hombre.
A veces quien adoras te utiliza
y tiemblo de pensar en el misterio
de si aquello que fuimos iba en serio
o solo era una sombra de ceniza.

Rosales






De la Luna

 



"Si tienes alas, ábrelas, sé viento" ( Luis Valero de Bernabé )



Ten ganas de subir al universo.
La oscuridad invierte en distracciones,
atarte a las siniestras condiciones
de un globo demoníaco y perverso.

Atrévete a flotar, la vida es una,
aunque te llamen rara, extravagante.
La multitud dormida es inquietante
y tú de noche vuelas a la Luna.

Son otros los que tiene un problema
cuando te ven insólita y extraña.
La sociedad, patética, te engaña
mientras ilustran la verdad suprema.

Escapa de la cárcel triste y honda,
ignora su rigor y su doctrina.
Es el amor el dogma que ilumina
la libertad mayúscula y redonda.

Desprográmate y vive en tu locura,
ninguna igual a ti soñó en tu mente.
Jamás serás feliz entre la gente.
El mundo es una hambrienta sepultura.



Rosales




martes, 5 de marzo de 2024

Luna

 


La guerra sigue un curso despreciable.
La tele bombardea pesadillas.
Emigran a Plutón las maravillas.
El odio es una bestia ingobernable.

La mente es un solar manipulable.
Pelean los corruptos por las sillas.
El mundo se somete con pastillas.
Viajamos a un futuro inhabitable.

El clima va a la muerte en una flecha.
La gente es una boca insatisfecha.
No existe para el pobre la vacuna.

Los buitres del poder están en celo.
La Tierra es el hogar del desconsuelo
y algunos ya volamos a la Luna.


Rosales




Sombra y perro

 


Bajo una marca oscura y arbitraria,
por fuera estoy tan fría como el hierro.
Ocupo una entidad y la contraria.
Una mujer que vive y va a su entierro.

Parece que me oprime mi adversaria,
peleo por salirme del encierro.
Con una atemporal indumentaria,
vuelo en la sombra que acompaña al perro.

La luz, a veces hálito, se trunca
y se me enreda la palabra nunca.
No alcanzo a que mi doble se despierte.

Tal vez es un recuerdo y ya no existe,
y yo soy el fantasma solo y triste
que observa desde el lado de la muerte.


Rosales




Secreto

 


El aire entero sucumbió en la hoguera
sobre un infierno de consciencias rotas.
Ardí por dentro desde el hueso afuera.
Cayó la fuerza de sumar derrotas.

La vida entonces transformó su objeto,
mostró su rostro elemental, nocivo.
Cualquier futuro se volvió un secreto
indescifrable, agotador y esquivo.

Hallé el rescoldo del dolor amargo
en la penumbra del oscuro sello.
Cubrió mi espalda con su abrazo largo
y, muy despacio, me besó en el cuello.

Nostalgia, dime, si te irás un día
al infinito de lejanas naves
o vas a ser la interminable guía
y el alimento de mis versos graves.


Rosales




Isabel V

 



Cuando Isabel se escribe en los poemas,
su corazón es furia de cascada,
la letra le desborda la mirada
y el verso se le escurre por las yemas.

Cuando Isabel escribe con los miedos,
la fuerza eleva un reino entre los hombros,
monta un suave escenario con los dedos
y se vuelca en el mar de los asombros.

Y si Isabel, romántica o sombría,
convierte su dolor en poesía,
explota la palabra en el papel,

libera al animal que lleva dentro,
la lírica dormida va a su encuentro
y es Isabel, la auténtica Isabel.


Rosales






Anhelo

 


La paz después de oscuros nubarrones,
el frio que a otro cuerpo te convoca,
las horas de dormir entre algodones,
los besos detenidos en la boca.

La fuerza reforzando posiciones
y el alma como el hueso de la roca.
La suerte actualizando sus versiones.
El modo de brillar cuando te toca.

La magia que te envuelve de improviso,
el metro que te lleva al paraíso.
Tener entre los brazos el anhelo.

Un logro sobre el verso a la deriva,
la cápsula benigna de estar viva
y el tren cuando circula por el cielo.


Rosales




Destello

 


No quiero un adonis que compre un anillo
ni un príncipe bobo ni un guapo de entrada.
Escojo al amante de nervio y colmillo,
al ángel caído de inquieta mirada.

No busco en tus ojos purgar el pasado,
beber tus dolores, sentir tu proceso.
Me inclino al deseo de estar a tu lado,
bajar al abismo, comerte de un beso.

Escojo que llenes de fuego la tarde,
la piel y los labios, las ganas, la mente,
que brille el destello del cuerpo que arde,
y hundirte en la boca del hambre caliente.

Me cansan las lentas rutinas del día,
el tedio que mata cualquier aventura.
Yo soy quien prefiere soñar la utopía,
el ave del cielo, siniestra y oscura.


Rosales




Invierno

 


No temas, ya me voy, no pasa nada.
Conservo tu recuerdo para el viaje,
un whatsapp sin icono ni mensaje
y el mapa del invierno en la mirada.
Me voy y dejo el puesto de invitada
a un vínculo carente de paisaje.
Prefiero la verdad al personaje.
Rechazo estar de niebla atravesada.
No temas, ya me marcho y poco importa
si puedo estar tranquila o me descentro.
Se acerca un porvenir de hermosas huellas.
Mi sombra sobre el cielo se recorta,
concibo otro futuro desde dentro
y vuelvo a mi lugar en las estrellas.

Rosales





domingo, 18 de febrero de 2024

Tesoro

 


Soy más de lo que adviertes, te lo juro.
Albergo un universo de papel
donde lucha la luz contra lo oscuro
debajo del tesoro de la piel.
Viajar entre neuronas no es seguro,
los sueños ponen rumbo al desnivel.
El combate regresa del futuro
y atacan pensamientos a granel.
Mi mente es una cueva de dragones,
un choque entre diversas opiniones
mientras nadie es quien tira la toalla.
La sangre es un dolor que acaba en tinta.
Soy a la vez idéntica y distinta:
una mujer y un campo de batalla.

Rosales